El agua es uno de los elementos vitales del hombre y también del fotógrafo. Ningún fotógrafo aficionado que se precie no desea obtener buenas imágenes de ríos, mares, fuentes y otros medios por los que transcurre el agua. Su tratamiento fotográfico siempre tiene dificultades ya sea por su movimiento constante, por los reflejos provocados, por el trabajo que supone llegar a lugares tan especiales, o simplemente por su complicado manejo en una sesión interior.
Dominar el arte de sacar fotos de agua requiere esfuerzo y dedicación. Lleva contigo un trípode para exposiciones largas, o una buena cámara que permita la entrada de mucha luz y/o un objetivo muy luminoso si la meta es paralizar el movimiento a velocidades muy altas. Los flashes no suelen utilizarse en este tipo de fotografía, pero en ocasiones y en ciertas composiciones los necesitarás.
En este artículo os ofrecemos 12 fotos en las que os enseñamos algunos ejemplos de lo que puede dar el agua para el fotógrafo. Paisajes, saltos, cascadas, ríos, reflejos, gotas detenidas en el tiempo… Echad un vistazo para ver lo que hacen otros fotógrafos y sacad ideas e inspiración para las próximas salidas.